VIAJE / RETIRO DE COACHING EN TERUEL

El concepto de Crecimiento Personal, indica un proceso de mejora y por tanto de evolución, de estar preparado para conocer la verdad que desarrollamos y en la que vivimos. Esto implica reconocer qué aspectos de nuestra persona y vida que se pueden mejorar, conocernos más, ir tomando consciencia de lo que nos resulta perjudicial, mejorando aquello que nos afecta emocional y mentalmente. Así, podrá crear unos fuertes cimientos personales que le den una mejor calidad de vida como seres humanos.

Los talleres están orientados hacia la creación de un espacio donde sea posible desarrollar terapéuticamente las potencialidades humanas de cada individuo. Estas potencialidades, generalmente se ven frenadas por aspectos negativos internos propios de todo ser humano, que se expresan tanto a nivel individual como en relación a los demás.

Se trata de conseguir un mayor grado de consciencia de que nos genera determinados estados mentales y emocionales, y de las propias limitaciones que todos tenemos como seres humanos; así como perseguir un mayor grado de conocimiento de los factores que nos impiden vivir con el potencial de lo que verdaderamente

, lo que nos ayudara en los momentos críticos de nuestra vida, incrementando nuestro autoconocimiento, movilizarnos hacia cambios positivos y, sobre todo, lograr la voluntad necesaria para no resignarnos a vivir de cualquier manera, y querer lo mejor para nosotros mismos.

Todo el mundo necesita pararse en determinados momentos de su vida para plantearse qué puede mejorar. Los grupos ayudan a enriquecernos, compartir y conocernos mejor.

Las actividades:

• Se centran en la práctica grupal, como un espacio de crecimiento personal desde un aprendizaje terapéutico.
• Dicha práctica da especial importancia a la necesidad individual, creando espacios de implicación para su desarrollo y encauzamiento.
• El proceso se encamina hacia el autoconocimiento, la satisfacción y la autosanación; es decir, lograr que la persona se haga responsable de sí misma, de lo que siente, lo que piensa y lo que hace; y que logre transformarlo.
• La práctica de la escucha y autoobservación ayuda a descubrir en qué áreas fluye la persona, y en cuales se bloquea. El conocerse tanto a uno mismo, como a sus propios límites, es lo que le permitirá una mejor calidad de vida.