Siempre he sentido que la voz, el canto, formaría parte de mí y de aquello que realmente soy. Transformar los bloqueos por medio del arte es un legado que todos los seres vivos tenemos. No importa tanto el resultado sino la acción de llevar a cabo ese recorrido que nos convierte en una mejor versión de nosotros mismo. No podemos impedir que nos pases cosas ni acontecimientos difíciles pero podemos elegir que hacer con ello. Usar la voz como una herramienta de liberación y sanación en mi caso concretamente me devolvió la vida y la esperanza. MI camino espiritual no comenzó a despertar a ninguna edad, ya traía el recuerdo desde los 2 años que tenía un propósito de realización y ayuda y que el arte sería el medio y la herramienta para conseguirlo., aunque no supiera como. La fe y la paciencia serían dos aliados para dejar que el universo me mostrara los planes que tenia para mi. Mi carrera profesional siempre estuvo vinculada a la unión de la espiritualidad y la creación en distintas artes, desde la pintura, el video arte o la música. Haciendo posible mi intriga en distintas disciplinas desde espirituales a artísticas. Como buscadora innata del conocimiento y la verdad no hay limite para seguir aprendiendo y recibiendo el inmerso potencial que la vida tiene que ofrecernos. No me define ninguna técnica concreta pues no pertenezco a una sola, conozco y practico bastantes pero es mi propia esencia la que me guía, mi conexión con los planos sutiles los que me forman con más profundidad. Si fuéramos capaces de recordar todo lo aprendido en nuestro propio bagaje de existencia no necesitaríamos tantos títulos para la mente. El alma es sabia por si sola y si nuestro corazón es la guía podemos estar seguros que la propia experiencia nos formará en aquello que necesitemos para nuestra realización. Aprendí a cantar de forma innata y autodidacta, creando un estilo único, poco recomendado por las escuelas clásicas de canto. La peculiaridad consiste en su vibrato, al cual le debe la conexión chamánica que logra al dejarse llevar canalizando distintas voces y una vibración que hace posible este trance hipnótico que se mueve entre los mundos, abriendo portales para dejar que lo divino ocurra.